Colaboración especial del doctor Alfredo Torres
En estas épocas de pandemia, algo que queda muy claro es que hay dos tipos de personas que tratan de convencer a las personas de que lo que publican en redes sociales o lo que graban en videos es la verdad acerca del virus SARS-CoV2, que causa Covid-19, o cuales son los tratamientos y las vacunas más efectivas para tratar la enfermedad.
¿Pero realmente te has puesto a pensar quienes son los que divulgan esa información? En la mayoría de los casos son periodistas o “influencers” que comunican la información sin saber o entender realmente sobre el tema. En otras ocasiones los médicos generales o con especialidades diferentes a la infectología, epidemiologia o salud pública, son los invitados a compartir sus conocimientos sobre la enfermedad o las vacunas, pero, aunque técnicamente sus conocimientos en salud son adecuados, la información científica en algunos temas es limitado.
Aún más problemático son los “médicos” que promueven tratamientos falsos o alternativos sin fundamentos científicos y que pueden dañar a sus pacientes o a la población en general, cuando esta información falsa se divulga en las redes sociales.
Existe un tercer grupo, los científicos, que realmente conocen a profundidad los patógenos o cómo actúan los tratamientos o las vacunas hasta el nivel molecular. El gran problema de muchos de los miembros de este grupo es que no pueden o saben comunicar al público sus conocimientos científicos o simplemente no tienen interés de hablar con los reporteros o escribir en redes sociales en términos fáciles de entender.
Como público en general, la pregunta es a quien escuchar y más aún, a quien se debe creer y confiar de lo que comparte. La respuesta no es tan sencilla, pero lo que nos ha enseñado esta pandemia, es que hay un mayor número de científicos y de médicos especialistas que han hecho un esfuerzo para aprender a comunicar los conceptos científicos y médicos de una forma sencilla y fácil de digerir y más aún, muchos reporteros y periodistas se están acercando a los especialistas para que compartan información verdadera y que permita a la población tomas decisiones que los permita salir sanos de esta pandemia.
Es critico que las escuelas profesionales que entrenan a médicos y científicos incorporen en su agenda curricular, temas de comunicación al público en general y el uso de redes sociales, con herramientas apropiadas y prácticas que permita compartir conceptos complejos de una forma didáctica e informativa.
Si algo podemos aprender de esta pandemia es la importancia de escuchar a los que hacen ciencia, pero más importante, escuchar a los que saben comunicarla.
@DrAlfredoTorre1