En el lugar de siempre y…

En el lugar de siempre y…
Antonio Abascal
El Blog de Puebla Deportes

El Blog de Puebla Deportes escribe Antonio Abascal 

El gol de Edson Álvarez al minuto 70 evitó que los nervios llegaran a los directivos del futbol mexicano y aunque el boleto al mundial de noviembre se conseguirá oficialmente el miércoles, ese tanto en táctica fija representa la tranquilidad porque el negocio del año está asegurado: México estará en los bombos del sorteo del próximo viernes y todavía aspira a entrar a las cabezas de serie aunque necesita de una combinación de resultados como la eliminación portuguesa a manos de Macedonia del Norte, que los Países Bajos no ganen su juego amistoso a Alemania y si estos se producen la escuadra tricolor necesitaría el triunfo ante El Salvador para meterse al bombo uno, si no sucede la combinación entonces estará en el bombo 2 https://www.youtube.com/watch?v=Zr2IApRRI64.

Así que como diría Juan Gabriel, México está en el mismo lugar en el que ya estuvo desde Estados Unidos 94 ya que la última vez que se perdió un mundial fue Italia 90 debido a los cachirules, por lo que en eliminatoria no queda fuera desde España 82 cuando el equipo de Raúl Cárdenas naufragó en el Premundial de Honduras con todo y que contaba como figuras con Hugo Sánchez y Tomás Boy (qepd), entre otros. Ese mismo lugar nos lleva a preguntarnos ¿para qué está México en Qatar 2022? Una pregunta de difícil respuesta ya que si bien es cierto que la escuadra de Gerardo Martino cada vez juega peor y que son pocos los signos de crecimiento que exhibe, también es cierto que la eliminatoria no es un parámetro para definir el nivel que se mostrará en unos meses en tierras mundialistas.

Durante este período de siete mundiales consecutivos, que el miércoles se convertirán en ocho, México ha clasificado sufriendo, por la vía del repechaje y, como diría Lavolpe, hasta caminando y el resultado ha sido el mismo: Octavos de Final, (el conjunto tricolor ya sólo comparte con Brasil el hecho de ser las únicas selecciones que se han metido en la segunda fase mundialista siete veces consecutivas), ahí en Octavos cada juego ha tenido sus matices, pero al menos en cuatro de ellos se dejó la impresión de estar cerca del famoso quinto partido: Contra Bulgaria en Estados Unidos 94, contra Alemania en Francia 98, el duelo con Argentina en Alemania 2006 y contra los Países Bajos en Brasil 2014, mientras que fue dominado sin paliativos por Estados Unidos en Corea-Japón 2002, Argentina en Sudáfrica 2010 y por Brasil en Rusia 2018.

Este lugar de siempre, parecido a una isla, ya ha ofrecido dos paisajes distintos: Uno optimista, soleado, casi paradisiaco, donde podemos hacernos todo tipo de ilusiones incluso más altas que el quinto juego, las próximas horas estarán llenas de conjeturas acerca de los posibles rivales en el grupo y hasta oiremos que las potencias no quieren encontrarse con México en el grupo. El otro lado de la isla muestra signos de tormenta, con expresiones como “¿a qué vamos al Mundial?, que si bien pueden estar basadas en el pobre rendimiento de la selección de Martino en el último año y medio, no toman en cuenta que el Mundial es una competencia donde también cuenta el estado de forma que se tenga en ese momento específico del torneo.

Al conocer este “lugar de siempre” la figura del director técnico se vuelve protagónica, hoy Gerardo Martino es cuestionado con razón porque su equipo cada vez juega peor, porque lo único que comunica es estancamiento, porque no hay respuestas para cambiar la dinámica general y la propia de los partidos, porque tal parece que no importan los momentos de los jugadores, sólo hay nombres que deben estar en las listas y en las alineaciones aunque una vez en los partidos varios no justifiquen su presencia; la eliminatoria que está a punto de terminar en CONCACAF fue particularmente triste ya que algunos rivales de la zona mostraron evolución y hasta un juego refrescante como Canadá ya clasificado a su segunda Copa del Mundo y primera para ellos en 36 años, como Estados Unidos con un grupo de jóvenes y buenos futbolistas y hasta Panamá que ahora se quedó fuera pese a ofrecer buen futbol en la mayoría de sus juegos y con la idea de que fue víctima de un error arbitral en su duelo contra México en el Azteca; por el contrario, México ha sido un compendio de dejadez, un compendio de futbolistas inflados por los jilgueros que a la hora de la verdad no ha brillado, como por ejemplo el famoso tridente Lozano, Jiménez y Corona.

Sin embargo, ahora que se consiga el boleto mundialista, este lugar familiar nos dice que habrá momentos en que los grandes medios analicen la continuidad de Martino, otros en los que se pedirá el apoyo de la unidad para que México llegue fuerte al mundial, pero el timonel argentino hoy está sentado en el mismo lugar del que estuvieron sus predecesores desde Miguel Mejía Barón en donde pueden ser los bien amados o los villanos preferidos durante varias semanas.

La letra de la canción de Juan Gabriel continuaba con la frase: “y con la misma gente”, algo que varios podrían señalar no sucede en el caso de la selección nacional, sin embargo, tendríamos que observar con más detenimiento. Cierto es que en esta racha de ocho mundiales consecutivos con presencia mexicana se han producido con siete entrenadores distintos ya que sólo Javier Aguirre repitió tras sus dos bomberazos para clasificar a Corea-Japón 2002 y luego a Sudáfrica 2010, también es cierto que han sido distintos directivos los que han estado al frente de la Femexfut y, por tanto, distintos directores de la otrora llamada Comisión de Selecciones, pero la realidad es que tantos técnicos como federativos de alto rango son empleados, privilegiados si usted quiere, pero al fin empleados de los dueños del balón que son los más interesados en llegar a la Copa del Mundo como puerta de entrada a un gran negocio pero quienes han carecido de visión para hacer más grande ese negocio al tiempo de ayudar a una verdadera trascendencia deportiva al “Tri”.

Hace unos instantes hablábamos de Estados Unidos y de su grupo de jóvenes que también sólo espera la confirmación matemática del miércoles en Costa Rica para regresar a una Copa del Mundo, ellos han construido una escuadra competitiva pero que todavía se encuentra lejos del nivel que puede lograr si con el talento con el que cuentan pueden construir un verdadero equipo https://www.youtube.com/watch?v=SAdebyysq1I, pero hoy tenemos que destacar que ese margen de mejora es parte del proyecto estadounidense para su mundial de cuatro años. Es decir en el vecino del norte hay un proyecto como lo hay en el otro equipo de Norteamérica, Canadá https://www.youtube.com/watch?v=g3hDBwXeXlI. En México el proyecto es clasificar al Mundial y luego ya veremos, podemos criticar a Gerardo Martino quien se ha convertido en otro de los privilegiados que goza de las becas de la Femexfut, pero él, como sus predecesores, sólo representa la punta del iceberg, cada uno de los técnicos ha tomado decisiones en la cancha y ahí llevan parte de la responsabilidad, pero no son los únicos.

Al final de cuentas, el futbol mexicano sí cumple la letra de la canción de Juan Gabriel, "Se me olvidó otra vez": “En el mismo lugar y con la misma gente” https://www.youtube.com/watch?v=RK29XTp-3_k, de tal forma, aunque es válido criticar a Gerardo Martino porque ha sido incapaz de revolucionar a la selección mexicana y lejos de ello ha creado un equipo que transmite estancamiento debido a la nula rotación de jugadores entre convocatorias, así como por no saber cambiar las dinámicas de los partidos, el argentino sólo es una pieza de un sistema que sólo busca el negocio, Martino se irá tarde o temprano, llegará otro que durante algunos meses dará la impresión de cambiar las cosas y será el nuevo bien amado, para después caer en la dinámica autodestructiva y llegará a ser el villano preferido, mientras los mismos de siempre siguen manejando el negocio, cada día con más voracidad y cinismo, y el futbol mexicano seguirá sin dar el verdadero paso de crecimiento.

Carezco de dotes de vidente para saber qué pasará en Qatar 2022, pero si haces las mismas cosas, te quedas en el lugar de siempre, con la misma gente, hay muchas posibilidades de que el resultado sea el mismo de los últimos veintiocho años.

 

@abascal2