Máscaras escribe Jesús Olmos
Si le preguntas a los damnificados por los huracanes Stan, Wilma o Manuel (3 de los fenómenos más devastadores que hayan tocado suelo mexicano en los últimos años), que les dice la palabra Fonden, te lo dirán con certeza: no significa nada.
Pese a la vasta experiencia del país en emergencias por causas naturales, el término nunca logró socializarse, algo distinto ocurre con el Plan Marina y Plan DN-III, ya que la atención que tanto el Ejército como la Marina prestan en respuesta a los desastres, no solo tiene el reconocimiento social, es relevante a nivel internacional por el nivel de organización.
Con frecuencia el tema del Fonden viene a colación por la supuesta falta de atención a damnificados por desastres naturales. Es cierto, hay huecos que no han sido llenados, que siguen ahí, que el Fonden no contemplaba y que a la actual administración le falta por cuajar, pero de eso a que el Fonden fuera una solución mágica a todos los problemas, hay un gran trecho de distancia. Varias columnas y análisis de los más sesudos opinólogos colocan al Fonden como un héroe que, en realidad, nunca fue.
Basta recordar algunos nombres de quienes tuvieron en sus manos los montones de dinero y que se suelten las anécdotas que nos llevarían a hablar hasta de campañas presidenciales pagadas con recursos de emergencias principalmente en el litoral del Golfo.
En la conferencia mañanera el presidente López Obrador y el gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García, evidenciaron muy bien lo que fue este Fondo.
“Eso del Fonden era un barril sin fondo, era una de esas partidas que se manejaban de manera discrecional que servían para que se robaran el dinero los funcionarios.
Cada vez que había una situación de emergencia a comprar y a comprar carísimo, si una lámina de zinc cuesta 400 pesos la compraban en 2 mil, así, entonces, ahora ya no existe eso y no hay límite, no hay un presupuesto, no hay un techo, es lo que se requiera.
Y yo no se quienes eran los del Fonden, quienes estaban ahí antes, dependía del Secretario de Gobernación, pero estos casos ahora los atiende manera directa el presidente y el secretario de la Defensa y de Marina, y el gobernador de Veracruz…”, dijo AMLO desde Veracruz y algo tiene de razón, aunque no toda.
Agregó que “lo del Fonden lo usan mucho nuestros adversarios para estar friegue y friegue, dale y dale”, aunque como en todas sus exposiciones se reservó lo que ha hecho su administración para entregar justicia por el daño hecho a cada familia de este país, en especial las damnificadas de años anteriores.
“Se contrataron despensas por 500 millones de pesos a Soriana, se solicitaron y no le pagaron. Hoy estamos haciendo un acuerdo con esa empresa porque tiene demandado al Gobierno del estado por ese adeudo de 500 millones de pesos. No era el camino y tiene porque seguir siendo ese el camino”, dijo el mandatario veracruzano también omitiendo nombres y sin hablar de las denuncias que deberían sentar precedente sin dudarlo.
@Olmosarcos_