Parabolica.mx escribe Fernando Maldonado
Las imágenes del pasado hablan del presente. Explican por sí mismas la circunstancia que priva, como secuela de una trama política que devino actividad delictiva. Son algunos de los protagonistas que hoy enfrentan procesos penales diversos, pero no serán los únicos.
Un conjunto de personajes de diversa estatura pero misma calaña. Actores de esa etapa del pasado cobijados por el poder que edificó Rafael Moreno Valle, muerto el 24 de diciembre de 2018 a causa de la caída del Agusta, aparato convertido en emblema de la opulencia del momento.
El nuevo inquilino de San Miguel, Bernie a quien de manera equivocada han emparentado como familiar de Antonio Gali Fayad, otrora delfín del morenovallismo, fue servidor público de la mano de otra creatura del régimen cleptocrático del panismo de Moreno Valle: Fernando Manzanilla Prieto.
Bernie presume en su _time line_ en Twitter fotografías con personajes que podrían hilar con facilidad sorprendente, unos 150 años de prisión, según sus potestades y fortunas sospechosamente inusitadas.
“El Mejor Ejemplo a seguir en lo Laboral y el lo Espiritual … Hoy y Siempre gracias por tu Confianza @Fer_Manzanilla” escribió el ahora imputado de robo y ejercicio indebido de funciones, según consta en la carpeta de investigación 394/2020/FECC/UI-A, con ortografía propia de un analfabeta.
La línea de tiempo que comienza con Moreno Valle, líder del clan del que abunda información sobre la voracidad por el dinero y los negocios al amparo del poder público y termina con este presonaje menor, pero señalado de facilitar haber convertido en botín parte del mobiliario de un edificio patrimonio público: Casa Puebla.
Otros personajes de oprobio aparecen en el entorno cercano al imputado de rancio apellido en la socialité poblana que ahora mismo también duermen a la sombra, en un penal acusados de delitos graves.
El ex mando policiaco en la capital que encontró acomodo en el gobierno caciquil de los Mier en Tecamachalco, Alejandro N., señalado en las carpetas de investigación por la ejecución de tres agentes ministeriales el 20 de noviembre pasado.
“Que gusto contar con dos grandes amigos” escribió el ex mando policiaco importado por Facundo Rosas, el policía responsable de la muerte del niño José Luis Alberto Tehuatlie Tamayo en Chalchihuapan en julio de 2014.
Compañeros de la feliz fotografía, “Bernie” y Alejandro N., viven también una similitud: huérfanos ambos del poder y prepotencia del régimen encabezado por quien este 24 de diciembre cumple tres años de muerto, están en la cárcel luego de la caída de la aeronave con lo que comenzó el desmoronamiento de ese ese grupo, integrado por un conjunto de personajes que vieron años de opulencia.
Otra impronta digital que ofrece una paradoja si se observa en retrospectiva: la camaradería de este personaje pequeño en la esfera política en medio de un grupo con las características descritas y el ex rector de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, Alfonso Esparza Ortiz.
Otro personaje de conducta rapaz frente a las finanzas universitarias y por quien aún pesan acusaciones graves como las que enfrentan Eukid N., Alejandro N., Bernardo N., y los que deberán acompañarlos en un futuro cercanísimo.