Parabolica.mx escribe Fernando Maldonado
La estructura que Melitón Lozano Pérez construyó a su paso por la Secretaría de Educación Pública se edificó sobre endebles bases de ilegalidad, irregularidades administrativas y corrupción.
En la bitácora del ex funcionario hay nombres y apellidos de personas que carecen de perfil académico, administrativo y hasta de probidad que resultan en una paradoja en un personaje como Lozano Pérez que enarboló siempre el estandarte y discurso de la honestidad.
Se trata de una burbuja dorada que alcanza ingresos salariales muy arriba del concepto de la pobreza franciscana, según la tesis del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
El mandatario al que quemó incienso, pero que fue incapaz de maniobrar para evitar la gritoniza que un grupo de maestros de la sección 51 del SNTE protagonizó el sábado 22 en Ayoxuxtla de Zapata, en Huehuetlán el Chico.
La revelación de ese selecto grupo de seguidores de quien se asumió como aspirantes a la candidatura de Morena en 2024 pinta un paisaje en el interior de la Secretaría de Educación que va en sentido inverso a la proclama contra el gobierno rico y pueblo pobre, reiterado desde la llegada de la 4T al poder.
Uno de los privilegiados con Lozano Pérez ha sido Mariano Segundo Gallegos, ex asesor de la ex Subsecretaría de Educación Superior, América Rosas Tapia.
No obstante haber sido jubilado, la red de relaciones y alianzas lo ha llevado a tener distintas responsabilidades, incluso algunas de ellas sin contar con los grados académicos, como el de maestría, con un sueldo anual de 881 mil pesos.
Otro caso que llama la atención es el supervisor de bachilleratos, Rubén Guarneros Murrieta quien desde 2010 ostenta la clave E781700, se ha desempeñado como docente y tiene, como Segundo Gallegos un salario de envidia: 840 mil pesos.
Con un sueldo mas modesto, pero privilegiado, es José Juan Rosas Tapia, hermano de América Rosas Tapia, con 348 mil pesos anuales. Desde 2020 un grupo de trabajadores de la dependencia se mostró inconforme por las influencias de la hermana para que este obtuviera la clave como profesor titular B E9215.
El hermano de la ex subsecretaria trabaja también como docente en la Facultad de Administración de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla con el ID 100430077, lo que lleva a una obligada y elemental deducción: el que a dos patrones atiende, con uno ha de quedar mal.
No es entendible que con dos plazas de tiempo completo, una en la Secretaría de Educación y otra en la Buap, pudiera distribuir la jornada laboral sin desatender sus cargas de trabajo.
Fuentes de la Secretaría de Educación definieron a este consentido del sistema inescrupuloso edificado por el ex secretario de educación: “se caracteriza como una persona déspota, trata mal al personal y en todo momento presume el favoritismo de su hermana” la ex subsecretaria de Educación Superior.
Todo eso fue capaz de construir el ex secretario Lozano Pérez, sobre quien cayó puntual escrutinio tras los desatinos reiterados en la esfera administrativa y política.
Continuará…
@FerMaldonadoMX