“¿Cuánta más carnicería estamos dispuestos a aceptar?”
Basta, basta”, exclamó una y otra vez el presidente Joe Biden el jueves por la noche, al pronunciar un apasionado discurso a la nación en el que imploró al Congreso que tome medidas contra la violencia con armas de fuego después de los tiroteos masivos que, según dijo, han convertido las escuelas y otros lugares cotidianos en “campos de exterminio”.
En su discurso desde la Casa Blanca advirtió a los legisladores que los votantes deberían utilizar su “indignación” para convertir esto en un tema central en las elecciones de noviembre.
El mandatario estadounidense reconoció los fuertes vientos políticos que soplan en contra mientras trata de aumentar la presión sobre el Congreso para que apruebe límites más estrictos para las armas, después de que tales esfuerzos fracasaran tras ataques previos.
“¿Cuánta más carnicería estamos dispuestos a aceptar?”, preguntó Biden después de que la semana pasada un hombre de 18 años asesinara a 19 niños y dos maestras en una escuela primaria en Uvalde, Texas, y que el miércoles un hombre matara a cuatro personas antes de quitarse la vida en un centro médico de Tulsa, Oklahoma.