La celebración de este año será distinta a las demás en medio de una pandemia de coronavirus
En 1925, el secretario de Educación Pública (SEP), Puig Casauranc, solicitó a la CROM que el 1 de mayo los trabajadores le sumaran al Día del Trabajo la celebración del Día del Niño, como símbolo de cuidado y protección de los menores.
Esto sucedió después de que se instauró el Día de la Madre en 1922, por la necesidad de crear un día para festejar a los niños, según indicó la historiadora Susana Sosenski en un hilo en Twitter.
“Se consideraba que el trabajo infantil dignificaba, rehabilitaba y regeneraba moral, mental y físicamente y que el #DíadelNiño, sumado al #DíadelTrabajo, serviría para subrayar el valor del trabajo y la productividad entre los niños mexicanos. La CROM aceptó la propuesta de Puig”, explica Sosenski.
Con el tiempo aparecieron dificultades logísticas. El 1 de mayo era día inhábil en las escuelas mexicanas, por lo que se volvió difícil celebrar a los escolares. Así que la SEP dispuso que en las escuelas se celebrara anticipadamente el Día del Niño el 30 de abril.
La celebración de este año será distinta a las demás en medio de una pandemia de coronavirus, con más 3 mil millones de personas en aislamiento, con más de 3 millones de infectados en el mundo y más de 200 mil muertes.