“Nunca conté con el respaldo de nadie, inclusive nadie del partido”
La legisladora de la Ciudad de México, Alessandra Rojo de la Vega, tomó la decisión de separarse del partido que la llevó a ocupar un curul, por medio de la figura de representación proporcional, en el congreso de la capital, el Partido Verde Ecologista de México (PVEM).
A través de un “En vivo” de Instagram que duró más de 50 minutos, la diputada local informó a sus seguidores que después de las controversias que se vivieron el fin de semana con el partido y otros conflictos internos, ella ya no se sentía cómoda en la organización política, razón que la llevó a tomar la decisión de decirle adiós al PVEM donde fungía como Secretaría de la Mujer.
“Nunca conté con el respaldo de nadie, inclusive nadie del partido”, confesó la legisladora mientras contó lo difícil que fue para ella el entrar a la política después de trabajar y desenvolverse en organizaciones de la sociedad civil.
“Hoy me voy del Partido Verde por congruencia, porque me sentí usada, porque no tengo amigos, porque todo lo que hice, lo hice sola”, señaló al finalizar el “En vivo” mientras anunció que seguirá su carrera en la sociedad civil y que, por el momento, no estará en ningún partido.
Respecto a las voces que la han señalado como una legisladora que se ha colgado del movimiento feminista y de la lucha de las mujeres. Alessandra se defendió explicando que antes de ser diputada, ella desconocía muchos de los contextos en los que se desarrollan diferentes mujeres, pero que trabajando comprendió que no todas tienen la misma realidad.
Incluso señaló “nunca he permitido que el partido haga algo que tenga que ver con el feminismo, que vaya de la mano, que utilicen mis logros, pero sí hay que dejarlo claro, a mí el partido verde me ha dado este espacio”, aseverando que pidió al Partido Verde no tomar los casos donde ella apoyó a mujeres como propaganda política; no obstante, días antes de la elección, la traicionaron y utilizaron la violencia contra la mujer con spots.
Reafirmó en diversas ocasiones que “jamás ocuparía una lucha políticamente hablando”, sino que explicó que tuvo que aprender a legislar sola debido a que nadie del partido estuvo para ella, nadie le brindó apoyo ni asesoría, “yo no sabía cómo se hacía las cosas”.
Dijo que actualmente está bloqueada del Partido Verde, que las personas que consideró amigos como el diputado Jesús Sesma no le dirigen la palabra y ella no sabe cuál es la razón.
Contó a sus seguidores que para poder trabajar tuvo que comprar con su dinero un módulo móvil para ayudar a las mujeres, una oficina rodante que circuló por la CDMX y algunos estados de la república con el fin de ser más cercana y ayudar a las personas.
No obstante, recalcó que nadie en el partido la ayudó, que incluso fue amenazada por al forma en que estaba trabajando en el congreso, por las iniciativas que estaba presentando y que nadie dio la cara por ella ni le preguntaron lo mínimo sobre el caso.
Pese a lo anterior, señaló que buscó reelegirse en su cargo, que pidió ser candidata y nunca se le dejó. Quizo hacer una campaña, ayudar, ganarse el voto de las personas, ganarse el espacio, pero “no me dejaron ser candidata. Me dijeron que iba a ser plurinominal federal, de manera segura por mi trabajo. De lugar 1 pasé a lugar 3″, sentenció.
Comunicó que “el principio del fin” para ella se dio en el mes de marzo cuando decidió asistir a la marcha del 8M, en la concentración de mujeres emitió un “en vivo” para que los siguieran las mujeres que no pudieron asistir a la manifestación.
“A partir de este “en vivo”, todo fue un caos en mi vida políticamente hablando. El mostrar la realidad, el mostrar lo que vivimos, el enfrentarme a todo un sistema tuvo grandes repercusiones que nunca les he contado, para empezar me pidieron en el partido que renunciara a la candidatura, no por ellos sino porque se los había pedido el gobierno y un sin fin de amenazas, daños personales, daño a mi familia y todo por ir a una marcha”.
Fue ahí cuando comenzó a no estar cómoda en el Verde. Señaló que recibió bloqueo por parte de gente con muchos intereses; sin embargo, continuó en la organización porque le dieron la Secretaría de la Mujer Nacional, pero expresó que no pudo hacer nada porque “no hubo presupuesto para estas cosas”.
Por último, sobre el tema de los influencers con el Partido Verde argumentó que no sabía nada sobre la violación a la veda electoral, señaló con enojo y tristeza que nadie le pidió opinión, que nunca se respetaron sus comentarios a nivel interno.
Expresó que las agencias de publicidad y el Verde la utilizaron, ya que en los diálogos que les hicieron llegar a los famosos venía su trabajo y su nombre, aunque nunca la consultaron y tras analizar los hechos cree que su nombre pudo generar confianza y que por eso muchos aceptaron la propuesta.
En tanto a las declaraciones de Lambda García donde confesó que aceptó la campaña en apoyo a una amiga, señaló que ella no lo conoce, que nunca lo ha visto y que utilicen su nombre para justificar acciones de terceros la molestó. “Por eso el día de hoy no quiero estar en el partido verde, no quiero que usen nuestro trabajo, no quiero que usen el dolor de las mujeres”, concluyó.