La UIF también denunció a Gustavo Cárdenas Moreno
Con dos investigaciones federales por enriquecimiento ilícito y lavado de dinero, se encuentra Luis Cárdenas Palomino, y en Estados Unidos están considerando su extradición para juzgarlo por cargos de narcotráfico y colaboración con el Cártel de Sinaloa.
Por las denuncias de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), relacionadas con la adquisición de inmuebles, se abrieron las dos carpetas de investigación por la Fiscalía General de la República.
La Fiscalía Especializada contra la Delincuencia Organizada (FECDO, antes SEIDO) lleva a cabo la indagatoria de lavado de dinero, mientras que la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción (FECC) instruye la investigación por enriquecimiento ilícito.
En la primera, la UIF también denunció a Gustavo Cárdenas Moreno, dueño de Obses, empresa proveedora de equipos de espionaje para la Secretaría de Seguridad Pública cuando estaba a cargo de Genaro García Luna, superior jerárquico de Cárdenas Palomino.
De acuerdo con Reforma, se están revisando los pagos de salarios que Cárdenas Palomino recibió de Adamantium Private Security Services, empresa de Grupo Salinas, prestándoles sus servicios desde 2013.
Así mismo, en Estados Unidos existe una orden de captura contra Cárdenas Palomino, por tres cargos de importación de cocaína y conspiración internacional, relacionados con su presunta colaboración con el Cártel de Sinaloa.
La Corte Federal del Distrito Este de Nueva York ordenó la captura de Cárdenas Palomino y Ramón Pequeño, ex titular de la División Antidrogas de la extinta Secretaría de Seguridad Pública federal, en el mismo caso por el que García Luna fue detenido en diciembre de 2019.
El Departamento de Estado de EU no ha tramitado la solicitud de detención provisional con fines de extradición en contra de Cárdenas Palomino.