La campaña pasada, Nike tuvo un lío con los uniformes; ahora la empresa está entregando prendas de calidad
Nike aterrizó en la MLB con el ímpetu de un revolucionario, pero la realidad golpeó con dureza. Hace un año, la marca del swoosh lanzó la línea Nike Vapor Premier, un rediseño de uniformes que buscaba modernizar el diamante, pero terminó desatando un motín. Entre las fallas, había de todo: camisolas con letras pequeñas, pantalones transparentes, colores erróneos y tallas estandarizadas que hacían ver a algunos peloteros como si hubieran pedido su equipo por catálogo.
En abril de 2024, el problema era innegable y la MLB prometió arreglar el desastre. Un año después, los cambios ya son visibles.
La pretemporada arrancó con Cubs reportándose en Mesa, Arizona. Justin Steele revisó su jersey a rayas y comparó la parte trasera de su franela con una foto antigua. “Interesante”, murmuró al notar las diferencias. Dansby Swanson, patrocinado por Nike, encabezó las quejas por los tonos de los uniformes. Hoy, está satisfecho con las modificaciones. “Todos cometemos errores, pero Nike está haciendo lo posible por corregir esto”, reconoció en entrevista con The Athletic.
La presión de beisbolistas y fans logró algo inusual: que la MLB y Nike rectificaran. A partir de 2025, los uniformes locales y visitantes tradicionales volverán para el Juego de Estrellas, rompiendo con la tendencia reciente de vestimentas genéricas.
Nike confirmó que el ajuste incluye la reintroducción del material utilizado antes de 2024, comenzando con los uniformes grises de visitante en 2025 y los blancos en 2026. Otros cambios incluyen números más grandes y parches bordados en mangas.
A diferencia de hace un año cuando los peloteros tuvieron que adaptarse a cuatro medidas de pantalones, ahora están enviando sastres para tomarles medidas y que puedan desempeñarse sin preocuparse de que sus prendas se rompan como en 2024.