Máscaras escribe Jesús Olmos
Como si de temporada de caza se tratara, la Cuarta Transformación ha salido a buscar los votos que le faltan para alcanzar la mayoría absoluta en la Cámara de Senadores, para completar las iniciativas del llamado Plan C.
Se trata del paquete de reformas que llevaron como parte inicial de su Plataforma Electoral y que pasarían sin problema la aduana de la Cámara de Diputados en donde contarán con una cifra cercana a los 400 representantes en su coalición.
En el Movimiento de Regeneración Nacional estarían a tan solo tres escaños de alcanzar los tan ansiados números en el Senado de la República, con 82 espacios de los 85 que les son necesarios para hacer los cambios que se han propuesto a las leyes en el primer tramo del sexenio de la presidenta Claudia Sheinbaum.
La Cámara Alta podría quedar integrada por 60 legisladores emanados de Morena, 14 del PVEM y 8 del PT, además de 22 del PAN, 16 del PRI, 6 de Movimiento Ciudadano y 2 del PRD, de acuerdo con las estimaciones presentadas apenas conocido el resultado.
No han esperado a que sea agosto, mes en el que se concretarán las asignaciones finales de las senadurías plurinominales, una vez que concluyan todos los juicios de inconformidad y posible nulidad después de la avasalladora victoria electoral del pasado 2 de junio.
Puebla y Veracruz son dos de los estados en donde los morenistas, petistas y verdeecologistas han volteado a ver, ya que, tras arrasar en la mayoría relativa, estarían buscando hacerse de esos votos, por medio de los representantes de las primeras minorías.
En el territorio poblano, desde que se entregó la constancia de mayoría por el Senado de la República al priista Néstor Camarillo Medina, ha comenzado la cacería del líder priista cercano al polémico “Alito” Moreno Cárdenas.
Tras poner en duda la veracidad de la documentación que valida su postulación indígena, los morenistas han sostenido que no detendrán esta ofensiva hasta sus últimas consecuencias.
En respuesta se ha visto que, poco a poco, Camarillo ha venido suavizando su discurso antimorenista, extendiendo la mano a las autoridades electas y reuniéndose con
“El PRI extiende su mano para construir con las autoridades electas como el gobernador, Alejandro Armenta, para trabajar en todo lo que sea en beneficio de Puebla”, declaró Néstor como cereza del pastel.
En Veracruz, la cacería ha sido distinta, más sangrienta y arrojada. Recientemente se pudo saber que el senador electo Miguel Ángel Yunes Márquez, hijo del ex gobernador Miguel Ángel Yunes Linares, quien salió en calidad de prófugo del país señalado por diversos delitos, por lo que las autoridades ya pidieron a los Estados Unidos que lo localicen.
A pesar de que sería otro de los Yunes quien ocuparía el escaño, no sería difícil hacerlo doblar las manos con un hijo al que entre más días pasan, más delitos se le encuentran e imputan.
Y lo que está por venir…
@Olmosarcos_
Jesús Olmos
