El Instituto aplica fármacos antiglaucomatosos y procedimientos quirúrgicos para evitar ceguera en pacientes
El Instituto Mexicano del Seguro Social otorga a pacientes con glaucoma procedimientos quirúrgicos para casos de difícil manejo, suministro de fármacos o terapias que controlen la presión intraocular con la finalidad de que el paciente llegue a una ceguera de manera irreversible.
La coordinadora de Programas Médicos de Segundo Nivel de Atención, doctora Diana Aleida González Guajardo, resaltó que al ser una enfermedad silenciosa que no presenta síntomas y no tiene cura, es importante prevenirla mediante una visita con el especialista a partir de los 40 años de edad.
Detalló que para prevenir esta enfermedad es importante conocer los factores de riesgo y acudir con el especialista para tomar la presión intraocular; en las personas con diabetes, hacer una exploración de fondo del ojo de forma anual.
Explicó que en el Seguro Social, el paciente debe acudir a la Unidad de Medicina Familiar para solicitar atención y posteriormente ser canalizado al Segundo Nivel de Atención, donde recibirá una exploración oftalmológica completa, toma de presión intraocular y exploración de fondo de ojo, con lo que se puede determinar si hay sospecha de glaucoma.
Detalló que los tratamientos que ofrece el Seguro Social a los derechohabientes contemplan medicamentos antiglaucomatosos, que son los más usuales, además de procedimientos quirúrgicos que se aplican en casos de mayor complejidad. Se trata de una enfermedad que aparece en personas mayores de 50 a 60 años y es irreversible.
La doctora González Guajardo informó que anualmente, en sus tres Niveles de Atención, el Instituto atiende en promedio a más de 500 mil pacientes con glaucoma: en 2023 fueron 565 mil y en 2022, 524 mil.
Refirió que el glaucoma de ángulo abierto representa entre el 60 y el 70 por ciento de los pacientes con esa patología; quienes lo padecen deben tener en cuenta factores de riesgo como la miopía, diabetes y herencia materna principalmente.
En tanto, el glaucoma de ángulo estrecho en ocasiones obliga a recibir atención en las áreas de Urgencias y puede presentarse vómito, dolor ocular, visión borrosa, alteraciones en el campo visual y ojos rojos, síntomas de que la enfermedad está en una etapa avanzada y ya alteró el nervio óptico.