Lento inicio de los 49ers

Lento inicio de los 49ers
Pepe Gómez
El Blog de Puebla Deportes

El Blog de Puebla Deportes escribe José Manuel Gómez

La semana seis de la NFL abrirá este jueves con un duelo divisional en el Oeste de la Conferencia Nacional; los 49ers de San Francisco visitan a los Halcones Marinos de Seattle en circunstancias no esperadas, pues los gambusinos ostentan registro perdedor con dos victorias y tres descalabros, mientras que los dueños de casa son líderes del sector con tres triunfos y dos derrotas, además arriban al duelo de esta noche obligados a ganar tras dos partidos perdidos de manera consecutiva.

Los 49ers de San Francisco vienen de perder un partido de forma increíble, un juego que dominaban al medio tiempo con parcial de 23-10 lo terminaron entregando en la segunda mitad con catorce puntos sin respuesta que dieron la victoria a los Cardenales de Arizona por 24-23; por si fuera poco, ese descalabro representa la segunda derrota del conjunto de la bahía ante equipos de su división lo que lo deja pagando en un posible criterio de desempate, además ante los Carneros también dejaron ir la ventaja para caer 27-24.

El duelo de la semana anterior desnuda por completo al equipo dirigido por Kyle Shanahan, por el momento se ha mostrado como un conjunto irregular, incapaz de mantener el nivel en los enfrentamientos y luce como un equipo sobrado, pareciera que el talento que tiene en sus distintas líneas los hace pensar que son invencibles y en la NFL se debe trabajar para conseguir victorias semana a semana.

No se ganan los títulos en los meses iniciales de la temporada, pero han dejado escapar victorias ante equipos que aparentemente no estaban a la altura del que es considerado el rival a vencer en la Conferencia Nacional, actual monarca del sector y aspirante número uno a repetir el cetro George Halas que lo haría ganador del boleto al Super Bowl LIX que se disputará en Nueva Orleans.

San Francisco es una franquicia histórica, ganadora de cinco trofeos Vince Lombardi, aunque el último llegó en la campaña de 1994 cuando los gambusinos vencieron 49-26 a los Cargadores de San Diego en la edición XXIX del “Juego Grande” disputado en el Estadio Joe Robbie el 29 de enero de 1995; el mariscal de campo Steve Young implantó marca con seis pases de anotación, fueron 325 yardas en una noche donde repartió juego con el corredor Ricky Waters (108 yardas mezcladas y tres TD) y un excelso staff de receptores que incluía a Jerry Rice (139 yardas, tres TD), John Taylor y el ala cerrada Brent Jones, una unidad ofensiva donde Mike Shanahan, padre de Kyle, era el coordinador ofensivo.

El equipo dirigido por George Seifert contaba con una defensa que también incluía a varias estrellas, la secundaria era un lujo con Deion Sanders, Eric Davis, Tim McDonald y Merton Hanks; los linebackers Ken Norton Jr. y Rickey Jackson, por si fuera poco, Bryant Young y Dana Stubblefield como tackles defensivos.

Si retrocedemos a la década de los ochenta llegaremos al equipo que ganó cuatro trofeos con Joe Montana, Jerry Rice y un conglomerado de estrellas que hicieron de esta franquicia un equipo importante en la NFL; tres de los campeonatos los obtuvieron bajo la tutela del entrenador Bill Walsh y dominando rivales a la altura de los Delfines de Miami de Dan Marino, los Broncos de Denver de John Elway o los Bengalíes de Cincinnati de Boomer Esiason.

Con todo respeto para el actual roster de los 49ers en este momento no tienen nada que presumir, tendrían que bajar un peldaño, hacer reverencia y trabajar para encumbrar al equipo con un trofeo que alimente las vitrinas; talento tienen en cada línea, pero deben demostrarlo en el emparrillado y no sólo en temporada regular, también en los juegos de enero y febrero que es cuando se ganan los campeonatos, eso es lo que ha hecho falta con este conjunto que se ha quedado en la orilla en dos juegos por el Vince Lombardi ante los Jefes de Kansas City, incluido el del año anterior.

Kyle Shanahan vive su octava temporada al frente de los 49ers con un registro global de 66 victorias y 44 descalabros en 120 partidos desde las laterales, de las siete anteriores sólo en tres no pudo conseguir el boleto a los playoffs (2017, 2018 y 2020), la gestión del entrenador ha sido fundamental para rescatar al equipo de un bache y convertirlo en un equipo contendiente, pues bajo su mando han jugado cuatro finales en la Conferencia Nacional con registro de dos victorias y dos derrotas.

Al equipo de Shanahan le ha hecho falta dar el último paso, el centavo para el peso, el do de pecho, pues no ha podido consolidar los buenos números con la consecución del campeonato; este año vivieron un entuerto para renovar los contratos del tackle ofensivo Trent Williams, clave en el trabajo de la línea ofensiva que quedó garantizado con un convenio de 82.6 millones de dólares, 48 millones garantizados y un bono de 25 por la firma del acuerdo que lo liga al equipo de la Bahía.

Brandon Aiyuk también sostuvo un estira y afloja para obtener un acuerdo multianual garantizando su permanencia con San Francisco al firmar cuatro años por 120 millones de dólares y ahora toca desquitarlos; es ahí donde se ha quedado corto, pues en cinco partidos suma 21 recepciones de 37 pases que le han lanzado, son 314 yardas (62.8 por encuentro), sin anotaciones, por el momento lejos de las 1,342 yardas de la campaña pasada, un promedio de 83.8 por partido.

Los 49ers tienen talento en su pasador, pero este es su último año con un contrato de novato, la siguiente campaña deberán abrir la cartera si quieren mantener a Brock Purdy en sus filas, tremendo descubrimiento de un jugador que el año anterior facturó 4,280 yardas, 31 pases de anotación, once intercepciones y un 69.4 % en el porcentaje de completos; por el momento colecciona 1,374 yardas, seis pases de anotación, que lucen pocos y 4 intercepciones, que también deberían representar un foco rojo, pues sólo en dos partidos se ha ido en blanco en ese departamento.

Al ataque le ha faltado contundencia y se ve reflejado en el ranking de puntos donde ocupan la décima plaza con un promedio de 21.2 por encuentro, en yardas ganadas son el segundo mejor equipo de la liga con una producción de 2,037 (407.4 por partido), son la cuarta por aire con 1,317 y la séptima por tierra con 720; el equipo extraña al corredor Christian McCaffrey quien podría estar de regreso el 20 de octubre, cuando se midan a los Jefes de Kansas City en la próxima jornada.

El ataque terrestre ha estado cubierto por Jordan Mason, quien suma 536 yardas y tres anotaciones, cumplidor pero lejos del aporte estelar de McCaffrey que es un fuera de serie y un jugador que eleva el porcentaje de efectividad del equipo; por el momento el receptor Jajuan Jennings es quien levanta la mano en el ataque aéreo con 377 yardas y tres anotaciones, Deebo Samuel tampoco está en el nivel acostumbrado con apenas 233 yardas, el ala cerrada George Kittle también suma tres recepciones en diagonales y 225 yardas.

La defensiva a cargo del coordinador Nick Sorensen, quien tomó el puesto este año, está lejos de su mejor versión, es la décima en yardas permitidas con 1,539 (307.8 por juego) y décimo segunda en puntos aceptados con 106 (21.2 por duelo) cuando el año anterior terminaron en el tercer lugar; el equipo ha sido inconsistente pues vale la pena señalar que suman quince capturas de mariscal de campo, un departamento donde destacan Nick Bosa (3), Kevin Givens (3.5) y los recién llegados Leonard Floyd (2) y Maliek Collins (2.5).

El conjunto cuenta con una defensiva plagada de talento con el Linebacker Fred Warner, quien suma dos intercepciones y es líder tackleador con 24 acciones sin asistencia; es la secundaria uno de los puntos de mejora para una escuadra que busca contender por el título de la conferencia y el viaje a Nueva Orleans.

Por el momento los 49ers de San Francisco se encuentran lejos del presupuesto de 12-5 que muchos especialistas colocaban al arranque de la campaña; serán importantes los duelos en puerta para medir el trabajo de ajustes del staff de coacheo, pues después del enfrentamiento ante los Halcones Marinos, deberán recibir a los Jefes de Kansas City y los Vaqueros de Dallas previo a la semana de descanso, no es un calendario sencillo y los Gambusinos deben apretar tuercas si quieren ser actor principal en la película de 2024.

@jomanuelgh