La Editorial escribe Jesús Olmos
El camino por el que han optado los concesionarios del Transporte Público en Puebla es sinuoso.
Luego de que en 2021 recibieron un aumento de 2 pesos con 50 centavos, lo que debieron hacer fue modernizar las unidades, mejorar el servicio y atender las incesantes quejas de los pasajeros, pero no, se durmieron en sus laureles.
Ahora, llegan hasta las oficinas gubernamentales amagando que si no hay una nueva alza habrá inseguridad en las unidades, falta de mantenimiento y mal servicio, además se dicen estigmatizados.
Basta con que cualquiera de ellos se suba alguna de sus unidades y relaje el cuello, la espalda o los brazos, para encontrar la causa de su fracaso.
@Olmosarcos_