El Blog de Puebla Deportes escribe Luis Palacios
Este lunes el fútbol mexicano amaneció con un acontecimiento histórico con el fichaje de Santiago Giménez al AC Milan. No todos los días del año un jugador azteca ficha con un club de la elite italiana, aspirante a títulos y competencias europeas, la trascendencia de la noticia es llegar a uno de los mejores equipos del mundo.
Proveniente del Feyenoord de los Países Bajos, es un movimiento que sacudió el mercado de transferencias de la Serie A, la escuadra rossonera acordó un monto que asciende a la impresionante cifra de los 35 millones de euros. El contrato no sólo marca un hito en la carrera del joven atacante, sino que también subraya la apuesta del club italiano por el talento emergente de América Latina.
Cercano a los veinticuatro años de edad, Giménez firmó un contrato que lo une a la institución italiana hasta 2029, estará vistiendo el icónico dorsal “7”, que anteriormente pertenecía al español Álvaro Morata, ahora en el Galatasaray. Este movimiento puede consolidar su carrera en el viejo continente tras su paso por el futbol neerlandés y le asegura la presencia en una liga top con beneficios de ser considerado para la selección mexicana por los próximos dos ciclos mundialistas, Norteamérica 2026 y España-Portugal-Marruecos 2030.
Muchos han criticado la carrera de “El Bebote” quien nació en Buenos Aires, Argentina y a pesar de ello optó por la nacionalidad mexicana como parte del reflejo de la rica historia futbolística de su familia y de su formación en nuestro país. Su padre, Christian Giménez fue figura legendaria en el balompié azteca mexicano, jugando para equipos de renombre como Veracruz, América, Pachuca y Cruz Azul donde se convirtió en un ídolo https://www.youtube.com/watch?v=lxNCESxrHfs.
Ese profundo vínculo de su padre con “La Máquina Celeste” lo llevó a comenzar su carrera en las categorías inferiores donde debutó con el primer equipo en 2017 y en su primera etapa en Cruz Azul, marcó veintiún goles en 105 partidos, además conquistó una Copa MX y una Super Copa MX pero se atrevió a dar un paso que pocos dan, el de dejar la comodidad para emigrar al otro lado del continente.
Para 2022, el ariete se trasladó al Feyenoord, donde su carrera despegó, curiosamente disputó los mismos 105 partidos que en México, sin embargo lo hizo en todas las competencias, anotó 65 goles y catorce asistencias, ganó el doblete en la 2022-2023; campeón de la Eredivisie y la Copa KNVB; personalmente en la temporada 2023-2024 fue subcampeón de goleo cuando anotó veintitrés tantos en treinta partidos, lo que lo consolidó como uno de los delanteros más letales de la liga neerlandesa, aunque la catapulta fue la fase de grupos en la actual Liga de Campeones de Europa donde convirtió cinco dianas y ayudó a su ex-equipo a enfrentar la eliminatoria del playoff contra el que ahora es su nuevo ante su club en este mismo mes.
Santi ya tenía algunos días Milán cerrando su traspaso junto a su familia y su representante, la abogada Rafaela Pimenta, y este fue notorio cuando se le vio con Zlatan Ibrahimovic, consejero de los rossoneros para ver el duelo de la escuadra dirigida por Sergio Conceição y que representó el Derby della Madonnina frente al Inter, partido correspondiente a la Fecha veintidós de la Serie A y que terminó con empate a uno. El nuevo equipo de Giménez se ubica en el octavo lugar de la tabla general con 35 puntos en la Liga de Italia, competencia que va liderando el Napoli con 54 unidades por lo que la encomienda será aportar a la institución para alcanzar competencias europeas el año entrante.
El debut del delantero con el cuadro rossonero podría ser muy rápido cuando mañana se enfrente contra la Roma en los Cuartos de Final de la Copa de Italia en el Estadio de San Siro. Así Santiago Giménez será el octavo mexicano jugando en tierras italianas, uniéndose a Guillermo Ochoa, Johan Vázquez, Hirving Lozano, Carlos Salcedo, Rafael Márquez y Miguel Layún, sin olvidar a Pedro Pineda, quien fue el pionero al llegar en la Serie A en 1991 luego de un impresionante Mundial Sub-20, llamó la atención pero nunca llegó a debutar en el primer equipo del Milán, por lo que se fue sin pena ni gloria.
@Luis_APalacios