El Blog de Puebla Deportes escribe Antonio Abascal
Actualmente en el mundo del deporte se hablan de muchos factores que inciden en los resultados, grandes atletas han subrayado la importancia de cuidar la salud mental y en recordarnos que no son robots que siempre puedan rendir al máximo, mientras que este fin de semana quedó clara la importancia de la inteligencia emocional en el campo de juego en dos deportes distintos: El futbol soccer, con el Puebla vs América y el americano con el Super Bowl LIX donde las Águilas de Filadelfia se impusieron con contundencia a los favoritos, Jefes de Kansas City, evitado el primer tricampeonato en la era de los Súper Tazones, un brillante plan defensivo hundió a Mahomes y a los Jefes, mientras que la ofensiva fue aprovechando las ventanas que se abrían para construir una ventaja de 34-0 que fue imposible de remontar.
Mientras que en el Estadio Cuauhtémoc el América golpeó en momentos puntuales ante un Puebla bravo, valiente y que pese a la derrota fue capaz de darle a su afición motivos para no quedarse callada ante una mayor presencia de americanistas en el coloso dos veces mundialista y olímpico; sin embargo, la intensidad que imprimió en la primera parte le jugó en contra ya que faltó calma, algunos jugadores se salieron muy rápido del partido reclamando las decisiones de un árbitro sin personalidad que manejó las tarjetas con distinto rasero, que se dejó llevar por una llamada del VAR y que careció de criterio afectando el desarrollo de un partido que no fue malo, pero pudo ser mejor ante un planteamiento atrevido por parte de Pablo Guede que trató de presionar y con mucha intensidad el juego americanista, pero no contaba con la falta de inteligencia emocional de alguno de sus jugadores como Facundo Waller quien desde la airada forma de reclamar la mano de Cristian Calderón en el área se perdió y, por ello, tuvo que ser sustituido al minuto 32 por Ricardo Marín.
El América hizo pesar su mayor jerarquía, la calidad de sus jugadores, la experiencia de los últimos torneos, se dio el lujo de dejar en la banca a Álvaro Fidalgo y dejó libre para organizar los ataques a Alejandro Zendejas quien pasa por un gran momento, pero el Puebla no empezó mal con mucha intensidad; sin embargo, para aspirar a la victoria necesitaba ser perfecto y al minuto doce, José Rodrigo Pachuca salió a una cobertura, ganó, pero se precipitó al dar el balón hacia atrás lo que dejó en una gran posición a Víctor Dávila quien sacó un riflazo que se estrelló en el poste, el rebote salió directo a Zendejas quien con mucha técnica aseguró para abrir el marcador ante un Miguel Jiménez que regresaba tras verse superado por Dávila. El conjunto de Coapa aprovechó la primera que tuvo para irse al frente en el marcador y el equipo de la Franja se lanzó en busca del empate, prácticamente de forma inmediata se presentó una de las jugadas de mayor polémica cuando Jesús Rivas recuperó un balón afuera del área americanista en una acción donde por la inercia pisó a Zendejas, aunque el poblano ya había punteado el balón, posteriormente Waller buscaba lanzar a Quiñones, pero Calderón intervino en una acción donde claramente había mano en el área, todo el Puebla la reclamó y Waller lo hizo muy evidente por lo que se llevó la tarjeta amarilla. La revisión silenciosa optó por no llamar a López Peñuelas por lo que la escuadra local se sintió afectada, aunque al parecer prefirió ser salomónica y no llamar al juez ante una posible roja a Rivas y el penal en contra para el equipo que había sufrido el golpe sobre uno de sus futbolistas en mejor forma.
Waller empezó a reclamar todo, Jesús Rivas se confundió y empezó a cometer varias faltas, por lo que al minuto veinticuatro fue amonestado, así con algunos jugadores fuera del partido, la Franja intentaba y se equivocaba en el último pase para que la acción trascendiera como una donde Emiliano Gómez ingresó al área y en lugar de dar la diagonal retrasada donde Brayan Angulo llegaba por sorpresa y completamente solo, intentó terminar la acción sin consecuencias para Malagón; por su parte el América generaba peligro en las jugadas a balón parado, pero estaba lejos de ser avasallante como en otras ocasiones en el Estadio Cuauhtémoc.
Como Waller reclamaba y reclamaba, además de nublarse con el balón como de costumbre, Guede lo sacó para dar paso a Ricardo Marín, cuando vino la jugada que definió el juego. En un tiro de esquina a favor, Angulo sacó un disparo que fue tapado por la defensa americanista, el rebote fue ganado por los visitantes que mandaron un trazo largo para la velocidad de Zendejas quien ganó, Angulo había regresado y fue a la marca del seleccionado estadounidense quien con su habilidad intentó un autopase que el colombiano interceptó con una mano muy clara que el árbitro no vio y marcó saque de manos. La banca americanista se levantó a reclamar y puso presión en un árbitro sin criterio, el VAR (a cargo de Martín Molina Astorga y Christian Kiabek Espinosa Zavala como AVAR,para el fuera de juego) que actuó silenciosamente en la mano en el área americanista ahora sí llamó al central y le presentó imágenes claras de la infracción del colombiano y sugirió la expulsión porque era una acción manifiesta de gol, López Peñuelas hizo caso y sacó la roja en una determinación que el domingo la Comisión de Arbitraje calificó como correcta, si bien otros analistas arbitrales no estuvieron de acuerdo con la roja porque la jugada no reunía todos los criterios para determinar si era una acción manifiesta de gol https://x.com/i/status/1888448687019311367.
Más allá de la polémica, el Puebla se equivocó en la acción con la que se reanudó el juego, otra vez a balón parado, Efraín Orona fue superado por Sebastián Cáceres a segundo poste, el uruguayo recentró, Víctor Dávila no le pegó bien, el balón iba con dirección a Cáceres otra vez, pero Orona intentó despejar y al no pegarle bien le dejó la mesa servida a Henry Martín para que fusilara a Miguel Jiménez para decretar un 0-2 en el que el tricampeón exhibía su pegada y contundencia porque sin avasallar las dos claras que generó las convirtió en goles ante un equipo local que se sentía mal tratado por el arbitraje; el cierre del primer lapso fue un compendio de incapacidad arbitral: Jesús Rivas siguió cometiendo faltas ya con tarjeta amarilla, Efraín Orona recibió el cartón preventivo y acto seguido hizo un corte de manga sin sanción, es decir, el Puebla se fue confundiendo entre la intensidad inicial, más el sentimiento de injusticia, pese a ello, en una recuperación de balón Luis Quiñones llegó a las barbas de Malagón para acercar, pero su disparo cruzado fue repelido por el guardameta que siempre aparece para salvaguardar los intereses azulcremas. Fue una jugada clave ya que a pesar de su confusión el Puebla tuvo la oportunidad de acortar diferencia con su jugador más desequilibrante y el colombiano perdonó para acto seguido salir lesionado y provocar el ingreso de Fernando Arce para prácticamente actuar como contención y meterse como tercer central cuando el América atacara.
Con la ventaja de dos goles, América intentó sobrellevar las acciones del segundo tiempo, bajó las revoluciones a través del toque de balón ante un Puebla sin la fuerza necesaria para crear peligro, pero ya más centrado y sin caer en las discusiones con el árbitro, Jesús Rivas dejó de cometer faltas, Orona cayó al lado izquierdo donde aguantó primero a Brian Rodríguez y luego a Javairo Dilrosun; por su parte, Miguel Jiménez tuvo una buena noche al salvar en tres ocasiones su arco con buenas desviadas, una ante Víctor Dávila para mandar a tiro de esquina, otra en un riflazo de Calderón al que metió la mano para desviar al travesaño y la última ante un disparo de Javairo, dichas atajadas permitieron mantener en el juego al equipo de la Franja, cuyo técnico realizó los últimos cambios al 66 apostando por los jóvenes: Alberto Herrera ingresó por un cansado Franco Moyano, el debutante Tristan Jaimes hizo lo propio por el esforzado Pablo González y Cristian Mares fue a la cancha en lugar de Emiliano Gómez quien salió con molestias.
Los jóvenes inyectaron vida y dinámica al equipo, un balón recuperado en mediocampo por Tristan Jaimes permitió a Alberto Herrera lanzar a Jesús Rivas quien aprovechó que América no tenía un lateral izquierdo nominal para mandar un centro preciso donde Ricardo Marín se tendió para prender el esférico, hacer un golazo que significó su primero con la camiseta poblana y dar posibilidades a un equipo cuyo esfuerzo fue recompensado por una afición que empezó a gritar el “Puebla, Puebla” a pesar de ser minoría en el Cuauhtémoc. América quemó sus cambios con los ingresos de Rodolfo Aguirre y Cristian Borja para cerrar a Jesús Rivas y aunque no tuvo mucha claridad, si hubo algunos esbozos camoteros en busca del empate, el más cercano un disparo de José Rodrigo Pachuca, el canterano que tras su error inicial volvió a mostrar mucha personalidad para sobreponerse y competir con delanteros de la talla de Martín y Rodrigo Aguirre https://www.youtube.com/watch?v=t2cYd_7MOqM.
Al final es una nueva derrota en casa donde van tres partidos e igual número de descalabros, Juárez ganó y se escapó cuatro puntos en la tabla de cocientes, aunque los tres últimos perdieron por lo que se mantuvo el empate entre Atlas y Puebla que tienen un colchón de ocho puntos con respecto al Mazatlán; sin embargo, el equipo de Guede emitió señales que gustan a la afición poblana como el no darse por vencido, a la par de otras que ha sido capaz de mantener al margen de los resultados dentro y fuera del Cuauhtémoc: Jugadores convencidos, dinámica y un mejor tono físico; esos tres aspectos han sido constantes en los seis partidos, pero ahora ante un rival mediático, con la percepción de la injusticia arbitral la afición los valoró por encima del resultado.
Cabe destacar que el viernes el arbitraje fue malo por los dos, que el Puebla se equivocó más que López Peñuelas en las jugadas puntuales de Pachuca y Orona, pero sobre todo en su falta de inteligencia emocional, en su confusión entre intensidad y faltas continúas, así como reclamar constantemente al árbitro lo que también costó la expulsión de Pablo Guede quien no podrá estar en la banca en el duelo directo del sábado cuando se visite a los Rojinegros del Atlas que no han ganado en el torneo. El viernes faltó calma en el equipo de la Franja, aunque hubo aspectos positivos como constatar que la competencia interna ya eleva prestaciones en el caso del arco poblano, como la confianza que puede crecer en Ricardo Marín tras su gol, como los canteranos que siguen levantando la mano mientras que en la tabla de menores ya sólo faltan 230.4 minutos para cumplir con el reglamento. En general en que parece que la idea de Pablo Guede ha llegado a los jugadores que luchan por plasmarla en el campo; las formas no dan puntos, pero el viernes ya fue un equipo capaz de comunicar a su afición y ese es un paso adelante, a la espera de que los refuerzos sigan sumando, y que la lesión de Luis Quiñones no sea grave para que no se pierda muchos partidos, aunque en su caso sí debe elevar sus prestaciones.
Hoy por hoy la inteligencia emocional es otro factor que contribuye a los resultados deportivos, Kansas City se desesperó ante el gran trabajo defensivo de Filadelfia, el habitualmente sereno Patrick Mahomes forzó pases desde la primera serie ofensiva y ahí cavó la tumba de su equipo, porque las Águilas capitalizaron con dos anotaciones las intercepciones sobre el reputado mariscal de campo de los Jefes que abrieron la brecha en la primera mitad, además de que diferencia de otros equipos, Filadelfia no soltó a la presa hasta que estaba muerta; dos partidos, dos deportes distintos, un resultado esperado y otro sorpresivo, pero en ambos los equipos que obtuvieron el triunfo fueron los que actuaron más serenamente y aprovecharon sus oportunidades, mientras los que fueron incapaces de controlar sus emociones se llevaron el descalabro, aunque los Jefes tuvieron un castigo menos que las Águilas en yardas fueron más 75 por 59, lo que habla de faltas graves como sujetando y alguna falta personal https://www.youtube.com/watch?v=-rOmWIERvzo; el viernes el equipo de la Franja cometió veintitrés faltas. Ya con el paso de los días se debe reconocer que más allá de la polémica, más allá de algunas formas que gustan a la afición, el equipo de la Franja se equivocó más que el arbitraje y eso lo llevó a la tercera derrota en igual número de partidos en el Estadio Cuauhtémoc.
@abascal2