Hacen un llamado a detener la violencia
Monseñor Víctor Sánchez Espinosa, lamentó con profunda consternación el asesinato del bebé René Emiliano Sandoval el cual fue víctima de un violento asalto en el municipio de Zacatlán el pasado lunes 3 de febrero.
Desde la Catedral de Puebla, el líder religioso elevó oraciones por el eterno descanso del menor y expresó su solidaridad con la familia, asimismo lanzó un enérgico llamado a las autoridades estatales para que tomen medidas firmes y eficaces ante la creciente inseguridad que afecta a las comunidades poblanas.
“Hacemos un llamado urgente a quien tiene que velar por la seguridad de los ciudadanos, que se tomen medidas para que se pare esta violencia. No es posible que un niño de unos meses muera trágicamemte", condenó el Arzobispo.
Y es que, la semana pasada, cuando la familia de este pequeño se encontraba a bordo de su automóvil en los límites de Zacatlán y Ahuazototepec, fueron atacados por un grupo armado que al intentar asaltarlos, hirieron de bala al infante y a su mamá. Cuando estos recibieron atención médica, se lograron percatar que el pequeño perdió la vida pues su impactado en la cabeza.
Ante este caso, inmediatamente el gobernador Alejandro Armenta mostró su respaldo por este lamentable suceso, asimismo garantizó a los familiares no habrá impunidad al sentenciar qué este acto tendrá consecuencias para los culpables.
Mensaje a los peregrinos
En el contexto de la próxima peregrinación hacia la Basílica de Guadalupe, que tendrá lugar el 12 de febrero, Mons. Sánchez Espinosa exhortó a los fieles a caminar con espíritu de fe, pero también con responsabilidad y precaución.
“Este año, nuestra peregrinación no solo será un acto de fe, sino también una oportunidad para pedir por la paz, la justicia y el fin de la violencia en nuestro estado. Caminemos con devoción, pero cuidándonos mutuamente”, señaló.
El Arzobispo también pidió a los automovilistas que transitarán por las rutas de peregrinación que extremen precauciones para evitar accidentes.
Llamado a la unidad y la oración
Finalmente, Mons. Sánchez Espinosa reiteró su llamado a la paz, la justicia y la unidad. Invitó a la comunidad a unirse en oración por el alma de René Emiliano y por todas las víctimas de la violencia.
“Pidamos juntos a la Virgen de Guadalupe que nos ilumine y ayude a superar estos tiempos de oscuridad. Que nuestra peregrinación sea un grito de fe y esperanza por un futuro más justo y seguro”, concluyó.