parabolica.mx escribe Fernando Maldonado
Los frágiles soportes de los que pendía la seguridad entre poblanas y poblanos están por dar de sí. De suyo, inquieta que en tres semanas una treintena de personas haya perdido la vida en medio de eventos violentos.
Y sin embargo es la diatriba entre los políticos la que desalienta aún más. Las funestas consecuencias que la división trae se traducen en factura más costosa que suele pagar la mujer que lleva a los niños al colegio, el obrero en el transporte, el empleado en el centro comercial o el estudiante en cualquier sitio de recreo.
Apenas en la última entrega se sostuvo que Eduardo Rivera, el edil de la capital ya era el blanco de los dardos de la oposición política luego de que la dirigencia nacional y estatal panista le confirió condición de candidato al Gobierno del estado en 2024.
La virulencia de los ataques comenzó la víspera con la movilización de un grupo de trabajadoras de limpia que lo acusó de utilizar un fondo de ahorro para financiar una campaña que aún no comienza.
El despropósito se pinta solo. No por ilegítima, sino porque la movilización ocurrió unas horas después de que la dirigencia estatal de Acción Nacional “destapó” a quien ya se le había visto como el aspirante más rentable de la oposición para disputar el cargo de gobernador en las urnas en el verano del próximo año.
La ola de ejecuciones alentó al coordinador de los diputados de Morena y aspirante a la candidatura a la Coordinación de la Defensa de la Transformación, Ignacio Mier a reprochar a Rivera Pérez la búsqueda de la nominación: que se ponga a trabajar en lugar de buscar otro cargo, punzó.
Unos horas después, tres personas fueron ejecutadas en Tecamachalco, el municipio del que es edil Ignacio Mier Bañuelos, hijo del declarante furibundo en contra del panista.
Extraoficialmente se supo que, del hallazgo, dos mujeres muertas en ese lugar estaría relacionado “con los acontecimientos ocurridos en las últimas horas en la zona del triángulo rojo”, el sitio en el que desde la época del morenovallismo se fortaleció el delito de robo de hidrocarburo.
Aunque las víctimas parecen no ser vecinas del municipio en el que los Mier asentaron su feudo, el dato duro no es diferente al que arroja la nota roja de los últimos días en la zona metropolitana, particularmente si se toma en cuenta que fue ahí en el que tres elementos de la Policía Ministerial fueron ejecutados por la policía municipal en el gobierno de Mier junior en noviembre de 2021.
A diferencia de hace dos años cuando Tecamachalco fue colocado en el centro de la atención nacional, hoy está en curso un proceso político que terminará con la elección de junio de 2024. Ese trance despierta envidia, pasión y mala entraña.
La guerra abierta de grupos delictivos que arrojaron ese reguero de cadáveres es proporcional al fuego cruzado entre los diferentes actores de la contienda política, que no ha hecho sino mostrar deficiencias en los aparatos de seguridad y ceguera.
El regidor de Morena, Leobardo Rodríguez, aspirante a la candidatura a la presidencia municipal, demandó que solicite licencia al cargo Eduardo Rivera; la regidora Fernanda Huerta reviró: demandó congruencia al morenista y que se separe de la regiduría.
El diputado Mier Velasco también señaló al edil de la capital; Rivera Pérez ya se empecinó en sostener a su titular de Seguridad, Consuelo Cruz Galindo y mientras recrudece la guerra de acusaciones, poblanos de a pie comienzan a vivir con zozobra este periodo que arroja como saldo negativo otra víctima: la tranquilidad poblana.
@FerMaldonadoMX
