Pero no fue como antes...
Volvimos a hablar del tricolor, casi parecían los tiempos de peñismo recalcitrante que montaba sus obras teatrales en todo el suelo nacional.
A donde iban, como una carpa de circo llevaban todo el show. Ahí iba la avanzada que montaaba los escenarios fastuosos con la escenografía televisiva para que el mandatario bien peinado y perfectamente vestido se dirigiera a la nación.
Volvimos a hablar del PRI, el partido del que todos emanan por su ADN político, pero del que todos reniegan, huyen y hasta se autoexilian.
Volvimos a hablar de ellos, pero no fue la misma pesadilla.
Jesús Olmos
@Olmosarcos_