Pide arzobispo de Puebla por la reducción de actos violentos

Pide arzobispo de Puebla por la reducción de actos violentos
Parabólica.Mx

Realizó este gesto a 12 ancianos del asilo de Santa Inés

Después de tres años de suspender el rito por la pandemia del coronavirus, este 2023 el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, llevó a cabo el lavatorio de pies a 12 ancianos del asilo de Santa Inés, el cual es atendido por las Siervas del Sagrado Corazón de Jesús y de los Pobres.

Tal acto de humildad que realizó monseñor ante decenas de fieles reunidos en la catedral angelopolitana, es en alusión al gesto que realizó Jesús a sus apóstoles como símbolo de amor y dispuesto a ser humillado.

Sánchez Espinosa, refirió que este acto es con el fin de que todas las personas sean más humildes con el prójimo, sean cercanos con los más necesitados y, sobre todo, más fraternos.

Una vez más, se refirió a la violencia que vive el país y el estado, para decir que es necesario ponerle fin, desde un cambio en cada persona.

"¡Cuanta violencia!, ¡Cuantos feminicidios!, ¡Cuantos crímenes!, ante esta situación necesitamos como creyentes buscar en nuestros hogares la fraternidad y la caridad, los lazos de unidad y de fraternidad", expresó.

Y continúo: "Por eso hoy, este año, tiene un significado especial este gesto de Jesús con sus discípulos, como un signo de humildad y fraternidad".

Como parte de las actividades de la Semana Santa, el arzobispo también invitó a los creyentes a que asistan este Jueves Santo en punto de las 19 horas a la Misa de la Cena del Señor en la Catedral, en la que se recuerda el pan y la sal que Jesús compartió con sus apóstoles a quienes ordenó sacerdotes e instituyó la eucaristía.

Además, según la tradición católica este día las familias realizan la tradicional visita de las siete casas por diversos templos del Centro Histórico de Puebla, como una muestra de acompañamiento espiritual de Jesús en su Pasión, desde el huerto del Getsemani a la casa de Anás, de Caifás, de Pilato, de Herodes a Pilato y de ahí al Calvario. Al parecer, esta tradición nació en Roma en el siglo XVI con San Felipe N.

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