El caso, en Texmelucan a mediados de abril
Un caso probable de abuso sexual en contra de sos menores de edad exhibió la falta de protocolos en la Fiscalía General del Estado en San Martín Texmelucan, narraron a parabolica.mx fuentes que conocen del caso que involucra a dos trabajadores del Instituto de Servicios de Seguridad Social al Servicio de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).
Un enfermero que responde al nombre de Juan Antonio B., sería el responsable de violencia sexual en contra de dos menores de edad de seis y tres años, sus dos hijos menores que procreo con quien fue su esposa, Vanessa B., trabajadora en la misma institución en la capital poblana, en donde se desempeña desde hace un semestre.
Según la narrativa del caso, la madre de los dos menores, que ya estarían en protección del sistema DIF Estatal desde mediados del mes de abril, obtuvo un empleo en la capital, por lo que en la semana los niños quedaron a cargo del padre en Texmelucan, y en fin de semana se hace responsable hasta el lunes, día en que lleva al colegio para luego partir a su fuente de trabajo en la capital, y así sucesivamente hasta el viernes.
Separada desde hace un año del probable responsable, advirtió una pérdida de apetito y peso en los dos niños por lo que inquirió al de seis años por esas condiciones. El niño narró que por las noches el padre de los menores entraba a la recámara para hacer tocamientos a la niña de tres años mientras el niño debía dar la espalda para evitar ver esa escena, so riesgo de quedar sin recibir alimento durante el día, a manera de castigo.
Ahí comenzó el peregrinar de la madre de familia. Fue a la Fiscalía General del Estado para interponer denuncia, pero el agente del ministerio público negó esa posibilidad bajo el pretexto de que era la madre ten debía realizar los exámenes médicos; en el Hospital Regional de Texmelucan -en el que se desempeña como enfermero el probable agresor-, se negó a practicar los estudios.
Los llevó a la capital, en donde encontraron que ambos desnutrición, deshidratación y posible abuso sexual -en el caso del niño, pues refirió dolor en sus partes íntimas-, mientras el padre sigue en su puesto de trabajo, ajeno al caso que exhibe otra vez, un caso en el que la omisión y dilación en la investigación para favorecer impunidad frente a dos posibles casos de abuso sexual contra menores de edad.
