Reconoce mérito de activismo en favor de minorías que pueden legalizar género
Es modelo y tiene puesta la mirada en la asesoría de imagen y, además es una chica transexual. El proceso de conversión lo comenzó desde muy pequeña. Siempre supo que sería niña, no hombre y a diferencia de la generalidad de la comunidad en la que existe rechazo, estigma o exclusión, el pasado de Ivanna marca la diferencia.
No hubo rechazo familiar, desde pequeña estuvo en terapias, no debió hacer nada que no estuviera de acuerdo, no padeció abuso y no existe arrepentimiento. Se le ve plena y sonríe con facilidad.
Cada niña vive una historia completamente diferente, “entonces yo siempre lo he sentido desde chiquita y nunca he tenido algún tipo de confusión; entonces mi proceso si fue fuerte, pero forma parte de mi vida”, admite en una extensa entrevista con el equipo de parabólica.mx.
Hace más de ocho años que decidió convertirse legalmente en mujer, una oportunidad que le abrió el activismo en favor de la comunidad LGBTTQ+, aún y cuando no participa de las manifestaciones en ocasión del día para visibilizar a la comunidad trans o de la marcha por el Orgullo Lésbico-Gay.
Reconoce la aceptación del entorno familiar, “pero siempre lo he hecho yo sola”.
“Legalmente soy Ivanna: tengo pasaporte, licencia, acta de nacimiento. Yo lo hice en 2015, fui de las primeras y gracias a las otras niñas que han sido activistas es que se ha logrado”, afirma.
¿Qué podrías decir a otras niñas que no han tomado la decisión como tu?
Que lo hagan. Independientemente del género, que hagan los que las hará felices, la vida es muy corta para quedarnos con pequeñas cosas que quereos hacer, sólo por lo que vaya a decir nuestra familia, amigos, papás o quien sea; el estado de plenitud y felicidad es momentáneo. Estoy emocionalmente tranquila”.
Ivanna, ¿hay pretendientes?
Si, todo el tiempo, pero yo creo que a los hombres las falta mucho valor, tienen masculinidad frágil. Hay muchos más hombres que les gusta las mujeres como yo, las mujeres transexuales pero el simple hecho de lo que dirá la sociedad hacen que se detengan.
Debes despertar envidia Ivanna, ¿lo tienes claro?
Si, a las mujeres les causas un poco de envidia porque creen que te acuestas y despiertas así. No se imaginan por el proceso que pasas emocionalmente, cirugías, dinero. Ellas no saben todo esto porque creen que así naciste o porque así Dios quiso; entonces, la envidia sí es muy recurrente.
Los retos están ausentes. La situación laboral “para nosotras es mucho más abierta” a diferencia de hace diez años, sin embargo admite dificultades para encontrar un empleo “común”, como sucede con el resto de las personas en edad productiva en el país.
¿Cómo te ves en 20 años, Ivanna?
¡Dios! Antes si me programaba para corto, mediano o largo plazo. Ni siquiera sabemos si llegaremos a mañana. Prefiero vivir el presente.
Gracias Ivanna.
A ti, cariño. Sonríe otra vez.
