A casi 48 horas de darse a conocer la muerte de Julián Figueroa, su madre Maribel Guardia reapareció ante las cámaras en un breve encuentro con la prensa a las afueras de su domicilio al sur de la Ciudad de México.
Acompañada de su nuera Imelda Garza, quien quedó viuda con la tragedia, Maribel lució notablemente entristecida y se dirigió a los reporteros: “Gracias por estar en este momento tan difícil para nosotros”, dijo al borde del llanto para luego explicar que decidieron en familia cremar a su hijo para evitar una impresión en el pequeño José Julián, hijo del fallecido.
“A cremar para que también el bebé no viera su cadáver, iba a ser muy traumático para él. Necesitábamos vivir este dolor en familia, con gente que realmente conoció y amó a Julián. Vivir esto duelo que yo sé que apenas está empezando, nos falta mucho por vivir , por recorrer”, dijo respecto al funeral privado que se realizó al interior de su casa en Jardines del Pedregal.
"Pero Dios es grande, ayer llegó el padre José de Jesús e hizo una misa preciosa, donde hicimos un trabajo hermoso de despedirlo, de soltarlo, he recibido tanto amor de la gente, yo sé que varios programas le hicieron un homenaje a mi hijo, se los agradezco mucho”, dijo ya con la voz desgarrada