Medida se extiende por Nuevo México, Arizona, Texas y California
La militarización de la frontera sur se hizo una realidad en los Estados Unidos, ya que designaron regiones de los estados de Nuevo México, Arizona, Texas y California como áreas de defensa nacional.
El gobierno encabezado por el presidente Donald Trump, aumentará el control militar en la región y las restricciones de ingreso.
A partir de ahora, en estas zonas el personal de la milicia estadunidense está autorizado para detener a migrantes que crucen ilegalmente la frontera, como parte de las políticas antiinmigrantes que prioriza el republicano en su segundo mandato.
La embajada de Estados Unidos en México, encabezada por Ronald Johnson, precisó que estas áreas se consideran extensiones de bases militares, lo que significa que cualquier persona no autorizada que ingrese en estas zonas será objeto de multa, arresto, enjuiciamiento y encarcelamiento.
Afirmó que también está prohibido el ingreso de vehículos, tomar fotografías, hacer anotaciones, dibujos, mapas o representaciones gráficas del área y de sus actividades, a menos que estén autorizadas por el titular del Departamento de Defensa de EU.
“NO ENTRES. Arriesgas tu libertad en un viaje destinado al fracaso”, escribió la embajada a través de su cuenta de la red social X.
El tema no ha conseguido un respaldo unánime de todos los estadunidenses, pues por una parte, la gobernadora de Nuevo México Michelle Lujan ha criticado la medida al señalar un uso indebido de recursos, y por la otra el gobernador de Texas, Greg Abbott, la respalda.