Frenan su alianza con el albiazul tras pírrica suma de votos
La elección extraordinaria en Puebla dejó al Partido Revolucionario Institucional como la novena fuerza política en el estado por debajo de los partidos políticos locales y las fuerzas nacionales.
De los casi 60 mil votos emitidos durante la jornada electoral del pasado domingo, el tricolor solo registró 873 lo que representa el 1.43% del total, lo que lo ubica no solo por debate de Morena que obtuvo a mayoría de votos y 3 triunfos, o de Acción Nacional que ganó un municipio, o de Movimiento Ciudadano que fue el segundo partido más votado, sino por detrás del Partido del Trabajo, el Verde, y los partidos locales Pacto Social, Nueva Alianza y Fuerza por México.
En respuesta a estos pírricos resultados, su dirigente estatal Néstor Camarillo Medina denunció que el Partido Acción Nacional, liderado por su dirigente, Mario Riestra Piña acordó un acuerdo con el Partido Morena en la elección extraordinaria celebrada el día de ayer.
Por ello, el dirigente del tricolor anunció que su partido no formará alianza con los albiazules en las elecciones de 2027, tras acusar a la dirigencia panista de pactar “en lo oscurito” con Morena.
El senador priista expresó su rechazo a las dirigencias que buscan beneficios personales a través de acuerdos con el poder.
“No estoy en contra de las alianzas, pero si una dirigencia hace acuerdos con Morena, prefiero ir solo”, expresó.
Y es que después de que el partido tricolor no lograra victorias en ninguno de los cuatro municipios en disputa durante esta elección extraordinaria, también reveló que en la alianza de pacto con el PAN, el PRI aceptó postular a Marco Valencia Ávila, quien ganó en Venustiano Carranza, pero cuyo triunfo fue anulado en tribunales. Además, mencionó el caso de Mario Olvera Cortés, candidato impulsado por el PAN, quien al final de la campaña declinó a favor de Morena, lo que calificó como un hecho “extraño”.
Finalmente, Néstor Camarillo aseguró que sostendrá conversaciones con la dirigencia nacional del PRI y reiteró su postura de no aliarse con un partido que haga acuerdos con Morena. “O se es oposición o no se puede participar”, enfatizando que, si su decisión de romper con el PAN le cuesta la reelección al frente del PRI, asumirá las consecuencias.