Asegura que hubo respeto y cordialidad en el encuentro
La presidenta Claudia Sheinbaum retomó sus reuniones con los coordinadores parlamentarios en la Cámara de Diputados, Ricardo Monreal y, de senadores, Adán Augusto López Hernández, luego de una seguidilla de escándalos que involucraron a ambos personajes morenistas.
La presidenta había anticipado en su mañanera que se plantearían reformas como la del Poder Judicial, la Ley de Aduanas y todo el Paquete Económico, la Ley de Ingresos y el Presupuesto de Ingresos, previo al inicio del periodo se sesiones y que únicamente abordarían los temas legislativos.
La reunión comenzó alrededor de las 7 de la noche en Palacio Nacional y se extendió por alrededor de dos horas, también estuvo el senador Ignacio Mier, quien acudió tarde al encuentro.
A su llegada, Adán Augusto López evitó dar declaraciones del caso de su exsecretario de Seguridad, Hernán Bermúdez Requena, relacionado con el grupo delictivo La Barredora.
El diputado Ricardo Monreal fue el único que ofreció un posicionamiento posterior al encuentro en el que descartó por el momento cambios en la coordinación del Senado.
"Lo que yo observé fue una actitud de respeto con Adán Augusto y de ratificación de su trabajo al frente del grupo parlamentario de Morena en el Senado".
Monreal dijo que hubo cercanía y afecto, tuvo expresiones de respeto y de afecto ya que la presidenta y Adán se conocen desde de hace mucho tiempo y aseguró que la Presidenta es una mujer generosa, una mujer con una calidad humana, y humanista impresionante y nunca se tocó tema incómodo, tema de discusión, de diferencia o de algún reclamo de parte de ella.
Después de casi dos horas, señaló que fue una reunión prolongada, pero amable y cordial: "Ella estaba de buen humor, estaba muy en buen sentido, buen talante y nosotros estábamos deliberando la agenda".
El diálogo giró en torno a alrededor de “30 instrumentos jurídicos que se tienen que actualizar o modificar, incluyendo la reforma electoral, que va a empezar audiencias y foros”.